Blair Kauzlarich, profesora adjunta y administradora de formación e impresión 3D de Clarkson College de Omaha, Nebraska, tiene una relación personal con el uso de la impresión 3D con fines de educación del paciente, pues la utilizó como parte implicada en un caso de cirugía compleja. “No solo es mi trabajo, sino que también lo he vivido”, confirma Kauzlarich. “Cuando mi hijo tenía diez meses, le diagnosticaron un tumor cerebral que era preciso extirpar”. Kauzlarich obtuvo una copia de las tomografías computerizadas y las resonancias magnéticas de la historia médica de su hijo y colaboró con una radióloga para crear una versión en 3D del cerebro de su pequeño. Observar el modelo 3D permitió que ella y su esposo comprendiesen mejor cómo actuar respecto a la situación médica de su hijo. Aunque el tumor no resultó ser canceroso, Kauzlarich afirma que saber exactamente dónde se encontraba les ayudó a decidir cuál era el método quirúrgico más adecuado.
Modelo de cabeza impreso en 3D con un tumor cerebral raro denominado “papiloma de plexo coroideo” en el tercer ventrículo. El PPC es muy poco frecuente, con una incidencia inferior al 1 % de todos los tumores cerebrales intracraneales. Este modelo se imprimió con materiales para la impresora Digital Anatomy: VeroWhite, VeroClear y VeroMagenta.
Apenas unos meses después, Kauzlarich ayudó a poner en marcha el nuevo Centro de formación e impresión 3D de Clarkson College. Esta universidad ofrece programas de certificación y grado en campos sumamente solicitados de la atención sanitaria, tales como enfermería, atención sanitaria o radiografía. Gracias a Kauzlarich y su compañera Trish Weber, profesora asociada del programa de radiografía e imágenes médicas de Clarkson College, la oferta de certificación y formación incluye también la impresión 3D para la planificación prequirúrgica y la educación del paciente en entornos clínicos, una oferta que a veces queda restringida al entorno hospitalario. “Nuestro laboratorio de impresión es único porque no estamos adscritos a un centro hospitalario”, explica Kauzlarich. “La mayoría de los laboratorios de impresión se encuentran tras los muros de un hospital y solo permiten atender a personas de ese centro o de un estudio de investigación concreto. Sin embargo, al estar en una universidad, el nuestro nos permite atender a personas de todo el mundo”.
Kauzlarich trabajó con Weber para desarrollar una certificación en impresión 3D de vanguardia para técnicos radiólogos colegiados interesados en aplicar la tecnología de impresión 3D al campo de la atención médica. Sin embargo, Kauzlarich descubrió que algunos de sus colegas no estaban familiarizados con la visualización e impresión 3D. El certificado médico de especialista en impresión 3D forma a los radiólogos y a los profesionales sanitarios en impresión 3D con fines de preparación quirúrgica y educación del paciente.
Esta tecnología, que puede ayudar a mejorar la atención y los resultados de los pacientes, brinda al personal médico una forma de estudiar y practicar con modelos realistas. Por ello, Kauzlarich y Weber están convencidas de que se convertirá en la norma de la atención médica en los centros de todo el país. Diseñaron el certificado para ofrecer a los estudiantes una experiencia práctica con el software de impresión 3D y con las impresoras que los prepararán para satisfacer esta demanda del mercado.
“Practicamos para que todo sea perfecto, así que ¿por qué no con la cirugía?” señala Kauzlarich. “Es como prepararse para un examen. Te preparas, estudias y esto te permite sentirte lo más segura posible. Nuestros cirujanos pueden usar modelos impresos en 3D para practicar. En el mundo real, esto permite reducir los costes de quirófano, la anestesia y el tiempo de la operación y, a consecuencia de ello, mejorar el resultado para el paciente”.
“Además, hemos observado que los modelos impresos en 3D contribuyen a mejorar la cooperación del paciente”, añade Kauzlarich. “Es más fácil obtener el consentimiento si la persona entiende lo que está pasando”.
En el marco del Centro de formación e impresión 3D de Clarkson College, Kauzlarich y Weber también han establecido un laboratorio de impresión 3D que atiende a socios hospitalarios, pacientes e investigadores de todo el mundo, incluida Nebraska Medicine, una red integral de salud de la región de Omaha, Nebraska.
Utilizan Stratasys Digital Anatomy™ en su laboratorio porque, después de observar y tocar modelos creados con la impresora Digital Anatomy y de llevar a cabo estudios adicionales, Kauzlarich considera que esta tecnología permitirá a su equipo mejorar la atención y la educación.
Además, Kauzlarich y su equipo eligieron la impresora Digital Anatomy por su versatilidad y porque descubrieron que, con ella, el laboratorio puede crear modelos anatómicamente realistas y biomecánicamente precisos para los médicos que necesitan una forma visual de explicar un procedimiento único u otra característica anatómica concreta.
“Hace poco, se puso en contacto con nosotros un médico privado que actúa como experto médico en casos de indemnización por accidente de trabajo”, manifiesta Kauzlarich. “Los modelos específicos del paciente que podemos crear con la impresora Digital Anatomy son perfectos para explicar el caso a un jurado y mejorar la defensa del paciente”. Con el apoyo del laboratorio de Clarkson College, los cirujanos que quizás todavía no cuentan con suficientes recursos para crear su propio laboratorio de impresión 3D pueden practicar con modelos multicolores y de varios materiales.
“La impresión 3D es un lenguaje que hablamos todos”, apostilla Weber. “Tenemos un compromiso con la excelencia en el aprendizaje mediante la creación de vías que utilizan la impresión 3D como un lenguaje visual que todos entendemos”.
Modelo de un hígado impreso en 3D bajo la luz del visor de rayos X. Los estudiantes pueden practicar radiografías abdominales en nuestro laboratorio de rayos X energizado.
CONSEJOS
¿Qué consejo le daría a un centro que esté interesado en poner en marcha un laboratorio de impresión 3D pero no cuenta con la financiación necesaria?